Star Trek Mas Allá.

Es mejor decir que no todo lo vale cuando ya estamos ante la conducta de un viejo conocido, porque entre tanta hipérbole y sistematización de las subculturas urbanas así llamadas Geeks, surge la necesidad de encomendarse al dios Roddenberry para que no castigue a los blasfemos de tal insolencia, es más, como surge de un buen legado de aventuras intergalácticas que se han transformado en una verdadera religión, con millones de fanáticos en todo el mundo.

Ahora, la naturaleza del hombre, vista de modo simple y directo, la tenemos adjunta como archivo infeccioso esta tercera entrega, la que surge como el paria de sus anteriores con el fin de terminar (Supuestamente) la odisea cinematográfica iniciada por su profeta más importante J J Abrams. Entendiendo que finalmente todo el peso esta en esta y cuyo patrón de historia sigue coincidiendo con el tipo de propuesta entre mundos paralelos, que transforma a esta saga en el espejo reflejando la otra cara del que la mire.

Tal como hemos dicho, sus anteriores tenían al menos mas orden y escrúpulos, condensando gran parte de su tiempo en contar los inicios de sus entrañables personajes, ahora, si pensamos de forma ecuánime, podemos decir que esta tercera es una sola, sin contar las anteriores y pensando en la adaptación directa desde la televisión al cine, su caída esta en los simbolismos y rememoranzas a las antiguas, siendo, eso sí, el único perdón y olvido de sus fanáticos.

Siguiendo con la historia, su director siguió la misma línea argumental y técnicas a las de su predecesor, aunque en cierto aspecto, la costumbre de venir haciendo las rápido y furioso, le otorgo a esta más dinamismo en sus escenas, pero de eso mas allá, nada nuevo, la importancia de la escena por sobre los diálogos hacen de esta una película más liviana y con menos contenido, pero si más entretenida, lamentablemente, no solo de entretención se vive el cine sino también de mensajes y momentos.

En definitiva, la película es buena, su reparto salva los vacios del director y los guionistas, que simplemente juegan con la costumbre de traspasar todo el trabajo hecho, pensando que sería más fácil darle un fin ahora, con un simple adiós, sin más vueltas que darle.

Por el momento.

Pero esta es otra historia…